Cambia todo cambia

No hay proyectos sin cambio: es su propia razón de ser, ya que siempre se trata de resolver o mejorar alguna situación, desde el punto de vista de quien lo promueva, y sea cual sea el mecanismo. La introducción de nuevas tecnologías como cambio de herramientas de trabajo, no es un cambio menor, no sólo por su propio uso, sino por su impacto en las personas y en su interrelación: la gestión del cambio es estratégica.

Cambia cómo disponemos de la información, cómo la accedemos, cómo la compartimos, con quiénes, cómo se ve y cómo puede usarse. Vale para información personal, laboral, conocimiento organizacional, y cada vez más masivamente. Cambian las tendencias culturales de los clientes, de los empleados, de los ciudadanos. Cambian nuestros servicios y nuestros roles: algunas funciones se vuelven obsoletas y se generan otras nuevas. Cambian las necesidades y las expectativas. Los límites dentro de los que fluye la información se hacen difusos. Éstas son sólo algunas características de la realidad en la que vivimos y sólo podemos prever que los cambios continuarán y cada vez más aceleradamente.

La visión de Adagio 360º que nos conduce es el resultado de conocer que esto está presente en todos los proyectos en los que trabajamos: todos son diferentes por su propia naturaleza, todas las Organizaciones son diferentes y cada una también lo es según el momento y el contexto. Siempre estamos impactando en mayor o menor medida a las personas, y en definitiva de eso se trata la gestión del cambio: de facilitar las transiciones desde la perspectiva humana.

Nuestra experiencia como consultores y la alta especialización de nuestros profesionales en la materia, avalan que también podamos apoyar a otras Organizaciones a mejorar las chances de éxito de sus proyectos y a desarrollar sus propias capacidades desde una perspectiva personalizada y única en cada momento, a través de la profesionalización de la gestión de proyectos orientada a su activo más valioso: las personas.